Gabriela
Chávez: Una sujeta que me sujeta y mantiene sujetados a muchos sujetos
Una
blanca dentadura deslumbra y dibuja una sonrisa en su rostro embelleciendo el
paisaje obsoleto de la biblioteca de Periodismo. El silencio se interrumpe
cuando emprende las primeras palabras, poco tímidas de hecho. Junto a ella, su
fiel compañera, que se encarga de transportar en su espalada los materiales
necesarios para realizar su rutina.
Un día normal en su vida comienza en la pensión que comparte con un grupo de chicas, luego de abrir sus ojos se dirige instantáneamente a su computadora donde se conecta a “facebook” para verificar el cronograma que derivará a sus compañeros de trabajo.
Tiene muchos proyectos en marcha y no puede descuidar ninguno, por eso la licenciada en ciencias de la comunicación despierta muy temprano para dirigirse a la Facultad de Periodismo, para llegar allí toma el colectivo 202, pero de vez en cuando decide tomar el 214 ya que a veces hay que hacer otro recorrido para irrumpir la rutina y ver paisajes nuevos.
Un día normal en su vida comienza en la pensión que comparte con un grupo de chicas, luego de abrir sus ojos se dirige instantáneamente a su computadora donde se conecta a “facebook” para verificar el cronograma que derivará a sus compañeros de trabajo.
Tiene muchos proyectos en marcha y no puede descuidar ninguno, por eso la licenciada en ciencias de la comunicación despierta muy temprano para dirigirse a la Facultad de Periodismo, para llegar allí toma el colectivo 202, pero de vez en cuando decide tomar el 214 ya que a veces hay que hacer otro recorrido para irrumpir la rutina y ver paisajes nuevos.
Entre
los grises
Desde sus comienzos Gaby no contaba con la
tecnología a la que hoy tiene acceso. Debía ingeniárselas escribiendo con
marcadores ya que era la única manera
que podía de percibir las cosas.
–No hay formas, solo bultos- me dice inquieta,
buscando las palabras justas para explicarme cómo su visión cambia dependiendo
el objeto que use. Teniendo tres
percepciones de la realidad en un mismo día es difícil acostumbrarse. Una es con
lentes de contactos que le permite definir los rasgos de las personas, con
anteojos es menor esa percepción pero igual puede distinguir colores y formas,
y la última es la percepción natural, la que tiene desde su nacimiento, ésta le
permite ver pero borroso. Allí se guía utilizando sus otros sentidos como los
sonidos o los aromas.
-Nadie va a caminar por vos, nadie se va poner
en tus zapatos si vos no lo haces- continua. Así cuenta que cada vez tiene más
proyectos enfocados a la discapacidad y como objetivo ayudar a aquellas
personas en situación de discapacidad para una mayor inclusión tanto en la
Facultad como en cualquier ámbito.
De
Tucumán a la Capital de Buenos Aires
Gaby es Licenciada en Ciencias de la
Comunicación por la Universidad Nacional de Tucumán, allí decidió que quería
hacer la maestría en planificación por lo que en el 2010 llegó a La Plata y
hoy, tres años después, está en proceso de tesis. La misma gira en torno a la
discapacidad, está haciendo un enfoque en el aprendizaje de quienes asisten al
programa de radio “Producción de nuevos sentidos” emitido desde la Facultad. Es
todo un desafío, tal vez eso es lo que la alentó a elegir ese tema.
- Para mí este es un año de hacer permanente; de caminar, de soñar, de construir, de crear, de imaginar y sobre todo de poner en dialogo lo de la discapacidad- me cuenta Gaby, mientras se frota las manos en las piernas sonriendo con la mirada llena de entusiasmo.
Está emprendiendo muchos proyectos, se encarga de la producción de la radio “Nos sobran los motivos”- es laboriosa, súper responsable con la pauta, nos manda información y hasta nos deja elegir la música, es muy compañera- dice Florencia Abasto, una de las locutoras del programa cuando le pregunté sobre Gaby.
Además de ser una buena cebadora de mate, se preocupa para que los integrantes del programa se sientan cómodos y puedan disfrutar del mismo.
- Para mí este es un año de hacer permanente; de caminar, de soñar, de construir, de crear, de imaginar y sobre todo de poner en dialogo lo de la discapacidad- me cuenta Gaby, mientras se frota las manos en las piernas sonriendo con la mirada llena de entusiasmo.
Está emprendiendo muchos proyectos, se encarga de la producción de la radio “Nos sobran los motivos”- es laboriosa, súper responsable con la pauta, nos manda información y hasta nos deja elegir la música, es muy compañera- dice Florencia Abasto, una de las locutoras del programa cuando le pregunté sobre Gaby.
Además de ser una buena cebadora de mate, se preocupa para que los integrantes del programa se sientan cómodos y puedan disfrutar del mismo.
Algo que la caracteriza a Gaby es la inmensa
sonrisa que permanece en su rostro. Sus proyectos y solidaridad la embarcan en
una aventura que permanece en su lista de quehaceres y no se olvida de
disfrutar de salidas con amigas. La vida es un viaje de ida y nada la hace más
feliz que vivirlo ayudando a los viajeros a caminar.